Fomento a la cadena de valor de la semilla de ramón

En la Reserva de la Biosfera Maya (RBM), el árbol de Ramón es una de las especies con mayor abundancia y distribución. Sus semillas, conocidas como “nuez de Ramón” o “nuez maya”, son reconocidas por sus propiedades nutritivas y curativas. Su sabor único hace de la semilla de Ramón un alimento cuyo consumo va en aumento. Con la recolección de este recurso no maderable se intenta aprovechar de forma sostenible el bosque, sin causar daño al ecosistema forestal. Tanto la recolección como la transformación en harina (para producir galletas, tortillas y bebidas), son actividades donde participan especialmente mujeres. El aprovechamiento y la comercialización de la semilla de Ramón tienen el potencial de generar ingresos entre la población local, incentivando a la vez la protección de la selva. Sin embargo, la dificultad para cumplir la normativa ambiental, las carencias de capital de trabajo, infraestructura y maquinaria, la poca organización social y las capacidades técnicas limitadas, han impedido un aprovechamiento sustentable y rentable en el pasado; sin olvidar que la productividad de Ramón en el bosque depende de factores bióticos y abióticos, por lo que su cosecha no siempre es factible. En este contexto, el Proyecto Protección y Uso Sostenible de la Selva Maya, en conjunto con la Asociación de Comunidades Forestales de Petén (ACOFOP) y en coordinación con otros actores como ONG, apoyó una iniciativa de fomento de ingresos mediante un enfoque de Cadena de Valor (CdV) de la semilla de Ramón, a fin de impulsar el uso sostenible de este recurso. Derivado de este enfoque, se conformó y fortaleció el Comité de la Semilla de Ramón (CdR) integrado por organizaciones comunitarias productoras, comercializadores.